Por Lisette Jimenez
Un forastero arribó a mi vida
con el poder de envolverla, perturbarla, trastocarla.
Me obsesiona,
se apodera de mis horas,
de mi mundo onírico,
mi conciente e inconciente.
El reloj gira docenas de veces recordando,
sus labios intoxicantes,
sus caricias enviciantes,
el despertar de un deseo constante.
He enfermado,
mi mente afiebrada delira
imaginando, recelando.
Sus manos transitando otros caminos
sus ojos seducidos por otros horizontes
su lengua degustando otros sabores
sus manantiales fluyendo en otros mares.
He enloquecido,
mi mente sufre un odio descarnado
asqueada, desesperada
la mueca irónica de sus labios
enrredado en un cuerpo ajeno a mi.
Entregada.... utilizada
tú, entregado a otro delirio
instintos básicos
impulso animal
venganza!!
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