Para el año 2050 "podría haber" alrededor de 200 millones de personas desplazadas a causa del cambio climático si no se toman las precauciones urbanísticas adecuadas, alertó hoy el español Joan Clos, director ejecutivo del Programa de Naciones Unidas para los Asentamientos Humanos (ONU-Hábitat).
Clos, que tiene rango de secretario general adjunto de la ONU, explicó en una conferencia de prensa que muchos de estos desplazados tendrán que dejar sus casas debido al aumento del nivel del agua de los océanos o a las constantes inundaciones y sequías.
Enfatizó que para empezar a evitar estas consecuencias, los centros urbanos, principales focos contaminantes del mundo, deben concienciar a sus residentes sobre la situación y tomar acciones que reduzcan los gases de efecto invernadero al tiempo que promocionen el medio ambiente sustentable.
Clos aseguró que estos datos se desprenden del "Reporte global sobre asentamientos humanos 2011: Ciudades y cambio climático", en donde también se plantean posibles soluciones para "mantener la huella ecológica al mínimo".
"La prevención debe ser observada a través de la planificación urbana y códigos de construcción de manera que los habitantes de las ciudades, especialmente los pobres, estén protegidos de desastres", refirió el director ejecutivo de ONU-Hábitat.
De acuerdo con el informe, muchas urbes exceden el promedio anual recomendado de 2,2 toneladas de dióxido de carbono per cápita.
"Existe una conexión dinámica, compleja y fuerte entre el desarrollo económico, la urbanización y el CO2, porque nuestros modelos de crecimiento posiblemente estén fundamentalmente imperfectos", dijo.
Según Clos, el documento también señala que los gobiernos locales y estatales están tomando la iniciativa para hacer frente a la problemática, "ante la ausencia de liderazgo federal o nacional".
A partir de este hecho, declaró que, dependiendo de sus contextos nacionales e históricos, "las autoridades de la ciudad pueden tener un considerable nivel de influencia sobre las reducciones de las emisiones de gases de efecto invernadero y los ciudadanos pueden hacer una diferencia global".
Este lunes, Día Mundial del Hábitat, el representante de la ONU se reunirá con el presidente mexicano, Felipe Calderón, y otros funcionarios locales en el estado de Aguascalientes, en el centro de la nación, para tratar, entre otros temas, los retos del país norteamericano para enfrentar el cambio climático.
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