Amílcar Figueroa Salazar.-Prólogo al libro Simón Bolívar y la «manzana prohibida» de la revolución latinoamericana de Néstor Kohan (Caracas, Editorial Trinchera, 2012)
Cuatro entrevistas y doce ensayos breves difundidos con anterioridad fundamentalmente a través de la internet e hilvanados por el quehacer del pensar y dar respuestas a grandes temas de la actual realidad continental y mundial fueron compendiados por el propio autor, Néstor Kohan, y presentados en esta obra bajo el título de: Simón Bolívar y la “manzanaprohibida” de la revolución latinoamericana que ahora Editorial Trinchera tiene a bien editar para conocimiento y debate de todas las revolucionarias y revolucionarios de la Patria Grande.
Es una obra donde se combina la riqueza conceptual contenida en trabajos como el prefacio a la edición mexicana del libro Nuestro Marx incluido acá bajo el título: Con Marx y con Zapata, después del posmodernismo, hasta tocar problemas cardinales para las revoluciones de todos los tiempos tales como el abordaje de la transición socialista donde Kohan toma partido reivindicando para las revoluciones actuales la propuesta desarrollada por Ernesto Guevara del Sistema Presupuestario de Financiamiento. A la vez, de invitarnos las páginas de este libro a mejorar nuestro conocimiento sobre distintas insurgencias existentes en el mundo actual pretendidamente invisibilizadas por la mediática globalizadora; insurgencias estas que reclaman la solidaridad de los pueblos. También incorpora textos que nos alertan sobre la profundidad, alcance y carácter estratégico de la batalla cultural magistralmente expuesta por ejemplo en Caliban y la cultura insurgente.
Temas como la cuestión nacional, estudiados en otros momentos históricos por pensadores como Lenín son replanteados acá desde una perspectiva bolivariana en las condiciones del siglo XXI y donde el autor asume una clara y radical visión, separando el significado diferente que la referida noción posee en el ideario latinoamericano respecto al que se pudo haber tenido por los días del surgimiento de los Estado nacionales en Europa e introduciendo una precisión que seguramente acarreará polémicas a la luz de los actuales avances de los proyectos integracionistas; nos referimos a la idea de que las burguesías están imposibilitadas de llevar adelante una profunda y verdadera unidad de nuestros pueblos en tanto por el propio desarrollo histórico de estas sociedades, la liberación nacional y las tareas antimperialistas que ella conlleva, deben abarcar al conjunto de la Patria Grande y a la vez, llevar aparejadas y en simultaneo construcciones socialistas. Aspira además en el capítulo Del 'Bolívar' de Karl Marx al marxismo bolivariano del siglo XXI poner punto final a la innecesaria contraposición Bolívar-Marx ubicando la naturaleza histórica del pensamiento y ratificando lo que la práctica política del presente siglo se ha encargado de corroborar fehacientemente: que el núcleo duro de la propuesta revolucionaria en América Latina se nutre de ambas fuentes.
Inscrita en la corriente del marxismo crítico –y la crítica es consustancial al pensamiento revolucionario- esta compilación encara no sólo al sistema del capital sino también a las propuestas reformistas de viejo y nuevo cuño. Es una lectura radical del momento y su superación y no podría ser de otra forma ya que fue elaborada por un intelectual de verdad, cuya honestidad, política lo conduce a una firme defensa de los procesos de cambio en curso en nuestro continente pero no de una manera apologética, acrítica. Seguramente cuestionar aquellas políticas donde ha primado la razón de Estado frente a los principios revolucionarios llevará a no pocas polémicas e incomprensiones, pero si algo dejó en claro el socialismo del siglo XX fue que su proceso de fosilización y derrumbe estuvo aparejado con la negación de la lucha de clases, con la idea de la posibilidad de la Revolución en un solo país y en consecuencia donde por “razones de Estado” el internacionalismo pasó a ser pura formalidad y retórica. No hay ni puede haber soluciones reformistas frente a la crisis sistémica cada vez más profunda, de ahí el llamado de Néstor Kohan a morder la fruta prohibida del comunismo, llamado que alimenta a no pocas rebeliones en el mundo de hoy.
Nos complace además que Néstor haya dedicado este libro a quien denomina “Quijote negro”, verdadero paradigma del militante revolucionario -y esto no es una frase vaga- en tanto es un comunista incansable, sabio y sencillo, que poco le atrae la parafernalia y el protagonismo convencido como ha vivido que la revolución es una acción colectiva, habiendo interiorizado profundamente aquel pensamiento martiano de que: “hay cosas que en silencio han de ser”. Es parte de la reivindicación que de las resistencias comunistas que se desarrollan en distintas partes del mundo hace un autor convencido de que… "el futuro pertenece a la insurgencia".
Son entonces múltiples las razones por las cuales invitamos a leer esta obra. Preferentemente una lectura desprejuiciada a sabiendas que no hay verdades absolutas, que la realidad es siempre más compleja que los textos y que para nada debemos condenar o subestimar el debate de ideas, particularmente en aquellos temas y problemas con los que hemos de tropezar permanentemente quienes tengamos trazada la búsqueda de la superación de la crisis actual por vía revolucionaria.
No hay comentarios:
Publicar un comentario