En Guatemala están listos los preparativos para la
investidura del ex general retirado Otto Pérez Molina como presidente de la
nación para los próximos cuatro años, tras haber sido electo en segunda vuelta
comicial en noviembre pasado con el 54,89 por ciento de los votos.
El ex general de 61 años recibirá el poder de Álvaro Colom,
para gobernar con un Congreso dividido en 13 fuerzas políticas, cuyos diputados
serán juramentados el sábado antes del traspaso de la banda presidencial. La
vicepresidencia será asumida por Roxana Baldetti, la primera mujer en ese cargo
en el historia del país.
Pérez Molina tomará posesión de su mandato con la promesa de
“mano dura” contra el crimen en un país con una tasa anual de 38 homicidios por
cada 100 mil habitantes y un promedio de 16 muertes diarias.
Recientemente afirmó que estima bajar la tasa de homicidios
a la mitad y aseguró que “en seis meses los guatemaltecos van a sentir un
cambio. Queremos que la población sepa que de verdad existe una preocupación de
las autoridades por mejorar la seguridad ciudadana”.
Otto Pérez Molina también recibirá un país con más de la
mitad de sus 14,3 millones de habitantes en la pobreza, y una desnutrición
crónica que afecta a uno de cada dos niños menores de cinco años, el índice más
alto de Latinoamérica y quinto en el mundo, de acuerdo a los recientes informes
de las Naciones Unidas (ONU).
Al respecto, el ex general manifestó que “en desnutrición
crónica, en cuatro años queremos disminuirla
en ocho o 10 puntos”.
En la economía, se propone impulsar una reforma fiscal para
mejorar las finanzas públicas, pues según datos oficiales en 2011 la
recaudación tributaria representó el 11,2 por ciento del Producto Interno Bruto
(PIB), una de las más bajas del continente.
A la ceremonia de investidura confirmaron sus asistencia los
presidentes de México, Felipe Calderón; Perú, Ollanta Humala; Haití, Michell
Martelly; Surinam, Desi Bouterse; El Salvador, Mauricio Funes; Honduras,
Porfirio Lobo; Nicaragua, Daniel Ortega; Panamá, Ricardo Martinelli, entre
otros.
Cerca de dos mil policías, apoyados por militares, se
desplegaban por sitios estratégicos de la capital al empezar este jueves la
llegada de delegados de unos 85 países, según fuentes de la cancillería.
No hay comentarios:
Publicar un comentario