Se extenderá por más de 4 kilómetros y llegará hasta el barrio 400 Viviendas. Las autoridades descartan una invasión de ratas en la ciudad. Ante el riesgo del probable avance de la “ratada” sobre la zona sur de esta ciudad, la Municipalidad realiza una zanja que tendrá una extensión de unos 4,5 kilómetros como medida preventiva.
Los trabajos se realizan a los pies del cerro Otto, que marca el límite con los populosos barrios Unión y El Frutillar, aunque el titular del área de Servicios Públicos del municipio, Ariel Salemme, manifestó que la zanja se prolongará hasta el barrio 400 Viviendas.
Salemme explicó ayer en radio Seis que se trata de una medida preventiva para frenar un poco el avance de la “ratada” sobre la zona de las viviendas.
La zanja tiene alrededor de medio metro de ancho por unos 80 centímetros de profundidad. El funcionario explicó que la idea es que las ratas no puedan cruzar y queden atrapadas y mueran. Dijo que los trabajos comenzaron el sábado y continuarán en las próximas dos semanas.
Desde el área de prensa de la Intendencia del Parque Nacional Nahuel Huapi, Larisa Beletzky explicó que el crecimiento de la población de roedores se focalizó hasta el momento en la zona rural del río Manso, a unos 70 kilómetros de Bariloche.
Pero informó que el monitoreo que realizan en forma permanente indica que hay un crecimiento de la población de roedores en la zona oeste de Bariloche, porque en ese sector hay bosques de caña colihue.
Beleztky sostuvo que no se prevé ese problema en el casco urbano, ni en los barrios del Este ni hasta la zona del kilómetro 15, de la avenida Bustillo, que conduce al Llao Llao, porque están muy alejadas de las zonas de bosques de caña colihue.
Prevención
Recordó que desde septiembre del año pasado que se vienen realizando talleres de prevención en las escuelas y en organizaciones intermedias para informar a la población sobre la situación.
Beleztky integra la mesa interinstitucional de trabajo por la floración de la caña colihue, que se constituyó en el mes de agosto de 2010 para trabajar con este fenómeno natural que ocurre cada sesenta o setenta años.
Señaló que hay setenta promotores de salud recorriendo la zona oeste para difundir las medidas de prevención, para evitar que los roedores entren a las casas. Aclaró que “no es un desplazamiento de miles y miles de roedores”.
Desde el área de prensa de la Intendencia del Parque Nahuel Huapi explicó que como hubo una mayor floración de la caña colihue se incrementó la población de ratas, que una vez que se acaba la semilla se desplazan en busca de alimento y espacio. Señaló que los roedores no se desplazan más de 500 metros de sus hábitat naturales.
Beletzky aseguró que este tipo de fenómenos dura entre uno y dos meses. Luego, la cantidad de ratas disminuye porque se dejan de reproducir y mueren ahogadas o por otros factores hasta volver a la población normal.
Destacó que hasta el momento en la zona de El Manso no hubo ningún caso de hantavirus.
Comentó que en la zona donde la Municipalidad de Bariloche realiza la zanja no se ha detectado un aumento importante de la población de roedores. Y explicó que en la zona oeste no se puede hacer una zanja por las características que presenta esa área.
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