El presidente de Ecuador, Rafael Correa, denunció este sábado la doble moral de la Organización de Naciones Unidas (ONU) por estar sometidas al manejo de Estados Unidos y justificar la invasión extranjera a países como Libia al mando de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).Durante su programa de todos los sábados, Enlace Ciudadano, el jefe de Estado suramericano llamó a rechazar la intromisión de potencias extranjeras en territorios soberanos."Rechazamos la descarada intromisión de la OTAN (en Libia), y respetamos la soberanía y autodeterminación de los pueblos y la coherencia" dijo en su acostumbrada rendición de cuentas ante la nación.Criticó la violación a la resolución de la ONU establecida supuestamente para garantizar la defensa de los civiles en la invasión aérea al país magrebí cuando en realidad la coalición atlántica ha dejado miles de muertos y heridos en cada invasión."Hoy bombardean miles de veces a Libia, supuestamente para que (Muammar Al) Gaddafi no reprima a su pueblo", observó Correa y se preguntó "¿pero qué hicieron con la dictadura de Augusto Pinochet en Chile, con los dictadores argentinos y centroamericanos?"."Les doy la respuesta: apoyarlos descaradamente", enfatizó el mandatario andino.
Sobre ese punto, exhortó al pueblo a remitirse a la historia cuando el domingo se cumplen 38 años de la dictadura en Chile.
"Revisen el rol desempeñado el 11 de septiembre de 1973 por los principales diarios de Chile, durante el criminal golpe donde murió el presidente Salvador Allende, legítima y democráticamente electo" recomendó.
Afirmó que los hechos de ese entonces demuestran que "la derecha siempre utiliza la sagrada palabra de libertad para justificar los más atroces atropellos" en relación al bombardeo estadounidense contra la sede de la Presidencia en Santiago.
El 11 de septiembre de 1973 los pilotos de los Hawker Hunter, de fabricación estadounidense, atacaron la casa presidencial chilena donde se encontraba la primera dama Hortensia Bussi y miembros del "Grupo de Amigos del Presidente" (GAP).
El golpe fue planeado por un sector de la Armada de Chile y los Estados Unidos. Posteriormente, se agregaron generales de los altos mandos de las Fuerzas Armadas y de Carabineros. El comandante en jefe del ejército, general Augusto Pinochet asumió la dirección del complot.
Rafael Correa señaló que "17 años duró la dictadura salvaje, sanguinaria, inhumana y totalmente ilegítima de Augusto Pinochet. ¿Qué hizo la ONU?, y ¿Dónde estaba la OTAN?". No los bombardearon, sino que los apoyaron descaradamente!", denunció.
Reiteró que en la época actual no se debe "caer en esas ingenuidades" por lo que llamó a rechazar "toda forma de intromisión extranjera".
Adicionalmente, el jefe de Estado llamó a estar atentos ante cualquier intención de manipulación mediática y desinformación de ciertos medios de comunicación.
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